La aflicción del sistema nervioso periférico a causa de la diabetes es muy conocida, se manifiesta por hormigueo, entumecimiento y/o sensación de ardor en las manos y los pies. Pero la afectación del sistema nervioso autónomo (sistema responsable de las funciones involuntarias como el latido del corazón, los movimientos intestinales, etc.), es más sutil y menos conocida por la gente.
Esto puede estar asociado con otras complicaciones de la diabetes o puede ocurrir de forma independiente.
Como se ve afectada la motilidad intestinal, una persona puede desarrollar diarrea crónica o estreñimiento. La retención de los alimentos en los intestinos debido a estreñimiento conduce a crecimiento excesivo de bacterias, lo que resulta en infecciones recurrentes y diarrea con o sin dolor abdominal.
La absorción de alimentos, así como la absorción de los medicamentos para la diabetes se deteriora debido a la reducción de la movilidad intestinal. Como resultado, el cuerpo se priva de nutrientes necesarios durante ciertos período de tiempo. Los niveles de azúcar en al sangre se trastornan, lo que conduce a repentinos niveles bajos o altos de azúcar en la sangre.
Una persona puede sufrir de presión sanguínea baja, a causa de la aflicción del sistema nervioso autónomo.
La presión arterial disminuye y se vuelve muy baja cuando se pone de pie después de estar sentado o acostado. Debido a esto, puede tender a sentirse mareado mientras está de pie o caminando.
La frecuencia cardíaca también es afectada por la alteración del sistema nervioso autónomo.
Esto es debido a que el corazón deja de ajustar su velocidad de acuerdo con el estrés. Esto también contribuye a la sensación de mareo y desmayos.
EL sistema urinario también se ve afectado por la neuropatía autonómica en los diabéticos.
La acumulación de la orina, incluso en pequeñas cantidades, se convierte en una fuente para el desarrollo de gérmenes, causando infecciones del tracto urinario recurrentes. La infección se agrava aún más debido a los niveles altos de glucosa en la sangre. Debido a la infección de las vías urinarias, se sufre un aumento de la frecuencia y la urgencia de micción.
La impotencia sexual es el problema más preocupante creado debido a la neuropatía autonómica. La neuropatía diabética es la causa más común orgánica para la disfunción eréctil en un hombre joven. El uso de alcohol y tabaco agrava aún más el problema, ya que se intensifica la neuropatía autonómica.
Muchas veces, la diabetes se diagnostica cuando una persona desarrolla alguna de estas complicaciones. Un paciente puede desarrollar una o más características de la neuropatía autonómica. Por ejemplo, una persona puede ver alterado su movimiento intestinal junto con hipotensión ortostática.
Por desgracia, una vez que el sistema nervioso autónomo está dañado no hay medicina para revertirlo.
Las drogas como la gabapentina (un anticonvulsivo), complejo B, y etcétera, se utilizan en estos casos, pero sólo proporcionan un alivio transitorio.
Al evitar permanecer de pie durante mucho tiempo y sentarse con las piernas separadas delante puede reducir la hipotensión postural.
El uso de medias elásticas o venda elástica mientras está de pie o camina también ayuda a minimizar la hipotensión postural. El ejercicio físico regular y baños calientes también son útiles.
Para evitar este tipo de complicaciones problemáticas es imperativo que la diabetes sea diagnosticada en la primera etapa.
Realizar pruebas para la detección de diabetes a todas las personas de mediana edad es una buena estrategia.
Un muy buen control de la diabetes por medio de la restricción de la dieta y fármacos anti-diabéticos puede retrasar o minimizar el desarrollo de complicaciones incluyendo la neuropatía. Evitar el alcohol y el tabaco es útil para reducir el sufrimiento.
Un paciente que se sabe que tiene diabetes debe cuidarse para asegurarse de que no desarrolle neuropatía autonómica.
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