Anteriormente la diabetes tipo 2 era comúnmente conocida como, la diabetes del adulto, ya que sólo los mayores de 35 años solían diagnosticarse con ella, pero en la actualidad, son más y más los jóvenes a quienes se les diagnostica esta enfermedad.
La diabetes tipo 2 es una enfermedad silenciosa, lo que significa que muchas veces no hay síntomas hasta que es demasiado tarde y la enfermedad ya ha comenzado a afectar al cuerpo.
Al ser más activo y tener hacer una elección de alimentos saludables, los adolescentes pueden ser proactivos con su salud y tener una mejor calidad de vida.
¿Cómo se desarrolla la diabetes?
Los alimentos que comemos se convierten en glucosa (azúcar) para que nuestro cuerpo pueda utilizar la glucosa para obtener energía.
Cuando tenemos la diabetes, del tipo 2, la glucosa se acumula en la sangre y no puede entrar en las células del cuerpo. Si el nivel de azúcar en la sangre permanece demasiado alto durante un largo período de tiempo, puede dañar los ojos, los riñones y los nervios.
Los adolescentes están en riesgo de desarrollar diabetes si tienen un familiar con la enfermedad, pesan demasiado para su altura, no hacen suficiente actividad física o son hispanos/latinos, indio americano, nativo de Alaska, afroamericanos, asiático o de las Islas del Pacífico por su predisposición genética según han revelado estudios recientes.
La mejor prevención es tomar medidas para mantenerse saludable:
Trata de mantener un peso saludable:
La mayoría de los adolescentes que desarrollan diabetes tipo 2 pesan demasiado. Se debe perder peso comiendo sano y manteniéndose activo.
Busca la guía de un dietista certificado para que juntos planifiquen una dieta adecuada para ti, de acuerdo a tus requerimientos y necesidades personales. Mientras tanto puedes comenzar disminuyendo la cantidad de carbohidratos que ingieres. Hará toda la diferencia.
Ser físicamente activo todos los días:
Usa las escaleras en lugar de ascensores, ve a clases de danza, has deporte, ve de excursión. etc no te sientes a ver la televisión durante más de dos horas por día.
Realiza actividad física todos los días:
Esto significa lograr que el ritmo cardíaco vaya más rápido durante el ejercicio. Pero, recuerda que depende totalmente de tu condición física, la Asociación Americana de Diabetes y la Asociación Inglesa de Diabetes, recomiendan que se realice ejercicio sólo durante 30 minutos al día, con eso bastará para que tengas maravillosos resultados.
No olvides que depende de tu condición física, si debes comenzar caminando sólo 5 minutos, disfrútalos y anímate, 5 minutos diarios para comenzar harán un cambio en tu vida.
Pídale a un amigo o familiar que se ejercite contigo. Muchas veces es más divertido caminar o jugar con otra persona.
Y por supuesto, duerme tus horas:
Está clínicamente comprobado que desvelarse y dormir menos horas afecta el metabolismo, los ciclos del hambre y la forma en que el cuerpo procesa la glucosa y secreta la insulina.
Procura descansar adecuadamente todos los días.
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