Muchos de nosotros descartamos los ronquidos o fatiga durante el día como pequeños problemas. Pero si en realidad se diagnostica la apnea del sueño (un trastorno en el que la respiración se detiene repetidamente y vuelve a comenzar), tenga cuidado.
Los adultos jóvenes y de mediana edad que sufren de apnea obstructiva del sueño de leve a moderada, con síntomas como ronquidos y somnolencia diurna excesiva, pueden tener un mayor riesgo de desarrollar hipertensión y diabetes, según los investigadores.
La apnea obstructiva del sueño es una enfermedad crónica potencialmente grave que implica el colapso repetido de la vía aérea superior durante el sueño. Los resultados mostraron que la apnea del sueño leve en adultos jóvenes está fuertemente asociada con un riesgo de desarrollar hipertensión en cuatro veces.
Del mismo modo, en comparación con los individuos sin apnea del sueño, pacientes con apnea del sueño moderada se asociaron con el riesgo de desarrollar diabetes en casi tres veces.
“Dada la asociación más fuerte de la apnea del sueño con anomalías metabólicas en este grupo de edad, se debe hacer hincapié en el monitoreo anual de los índices de síntomas metabólicos e intervenciones de estilo de vida, tales como el control de peso, dieta saludable, ejercicio regular y control del estrés”, dijo el autor Yun Li, investigador post-doctoral en la Universidad Estatal de Pensilvania.
Si no se trata, la apnea del sueño puede dar lugar a un número cada vez mayor de problemas de salud, incluyendo: La presión arterial alta, derrame cerebral, insuficiencia cardíaca, latidos irregulares del corazón y ataques al corazón.
“La detección y el tratamiento de la apnea del sueño leve a moderada temprana se justifica con el fin de prevenir una enfermedad cardio-metabólica futura”, añadió Li.
Para el estudio, publicado recientemente en la revista Sleep, el equipo realizó estudios de gemelos en una muestra de 1,741 adultos.
Los participantes completaron una entrevista detallada de su historia clínica al inicio del estudio y se evaluaron en un centro del sueño durante un estudio del sueño durante la noche. Los que no tenían hipertensión o diabetes al inicio del estudio fueron seguidos después de 10 años.
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Un Comentario
Muy bueno espero seguir leyendo sus publicaciones